domingo, 20 de agosto de 2017

No sé como titular esto

Hola chicos. Llevo unos días pensando en escribir esta entrada pero no sé si era lo correcto. En cualquier caso me he decidido por plasmar mi opinión y mi forma de ver las cosas. Hace 4 días, cuando tuvieron lugar los atentados que han sido tan comentados en Barcelona, estuve todo el día prácticamente aislada y me enteré de casualidad. Charlando con Miguel de Redsincrisis, me comentó algo del tema y no sabía a qué se refería. No le di mucha importancia, hasta que encendí la TV y vi que no hablaban de otra cosa. Había ocurrido una tragedia en la que varias personas han perdido su vida. Como en estos casos, siempre hay que dar un aplauso a todas las personas que de forma desinteresada ayudan a los demás, socorren a desconocidos. En definitiva, hacen todo lo que pueden por mejorar la situación aportando su granito de arena.

Entonces me conecto a las redes sociales, para seguir Twitteando sobre la temática del blog: ganar dinero. Y veo que hay mucha gente dando sus condolencias, su más sentido pésame etc. Lo normal, y no por ello digo que no sea algo de agradecer. Ver a tantas personas 'anónimas' que no han sufrido consecuencias directamente solidarizándose con los que si se han visto afectados: tanto con los que han perdido su vida como los que han visto como sus seres queridos han tenido la peor suerte del mundo y han perdido la vida.

Pero, por desgracia, siempre aparece cierto grupo de personas que parece que vive en otro planeta. Gente que publica Tweets falsos con el único objetivo de ganar seguidores. Gente que se inventa noticias. Gente que en lugar de ayudar a los demás, en vez de dar la mano a quien lo necesita y ofrecerle cualquier ayuda, se dedica a grabar vídeos y sacar fotos de personas que están a punto de perder la vida. Para luego publicarlo en las redes sociales. Lo peor es que muchos medios de comunicación hacen eso. No importa informar, importa que den click a tu noticia. Que te sigan más personas. Sacar más tajada. Por no hablar de las personas que condenan y culpan de todo única y exclusivamente a personas de cierta religión o ideología. El problema no es en qué ser supremo crees, en caso de que creas en alguno, ya que no se puede juzgar a una persona por su ideología.

Tenía que contar mi opinión y esa es que hay mucha gente que le importa muy poco que ocurran desgracias. Yo no sé como actuaría en caso de poder socorrer a alguien. No sé si sería tan valiente para arriesgar mi vida. Quien sabe, puede que sin pensarlo lo arriesgase todo por socorrer a quien lo necesita. Depende de la situación. Pero lo que si sé seguro es que no me pondría a sacar fotos, vídeos para plasmar el sufrimiento de otras personas.

Me he centrado en hablar de lo que no me ha gustado en estos dos últimos párrafos, pero prefiero quedarme con lo que he hablado al principio. Con la gente que de verdad ha apoyado, ha ayudado y ha dado todo lo que tenía de forma desinteresada en la mayoría de casos. No conozco personalmente a nadie que se haya visto afectado de forma directa, pero todos hemos sido afectados en mayor o menor medida. Nos damos cuenta que debemos permanecer unidos. Que hay que aprender a vivir el día a día y a no dejar pendiente ningún tema, tanto personal como proyectos que tengamos en mente. Tenemos que aprovechar cada día para acercarnos más a nuestros objetivos. Acabar esos eternos estudios, dar el paso y cambiar de trabajo o atrevernos a lanzar nuestra página web.

Desde aquí le doy mi más sentido pésame a los familiares de las personas que han perdido de forma trágica su vida en estos atentados. Hay que aprender a seguir adelante, hay que levantar la cabeza. Hay que hacerlo. Por los que no están con nosotros. Por los que siempre estarán con nosotros.

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